Donde entra el aire y el sol, no entra el doctor
Un refrán muy sabio, pues nuestra biología está diseñada para estar expuestos a la luz solar.
Llevar un estilo de vida mayormente encerrados ha hecho que disminuyamos el tiempo para estar al aire libre, llevando a la humanidad a una deficiencia muy grande de vitamina D, generando problemas de salud en la tiroides, perdida en la masa ósea, infertilidad, abortos de repetición, riesgo aumentado de preeclampsia en el embarazo, bebés de bajo peso al nacer y más posibilidades de tener diabetes gestacional, por el papel que juega la vitamina D en la resistencia a la insulina. Además es responsable de nuestro ciclo de día y noche, de los biorritmos en los seres humanos. El marca la vigilia y el sueño, fundamentales para la salud cerebral y para tener hábitos saludables de sueño.
Si estás en embarazo pide a tu proveedor de salud la analítica de laboratorio para saber cómo están tus niveles de vitamina D, y en el caso de tener los niveles bajos, es importante que te apoyes con la suplementación D3 con K2 para una mejor absorción.
Por ello te recomendamos
- Vivir el día lo más próximo al horario solar, un hábito maravilloso que te hará sentir a ti y a toda tu familia saludables y alegres.
- Tomar el sol desde recién nacidos con la menor ropa posible y sin cremas bloqueadoras. Si, así es, sin bloqueadores solares. Alrededor de los años 60 se le empezó a dar una mala prensa al sol, haciéndolo responsable del envejecimiento prematuro, unido “casualmente” a el ingreso al mercado de las las cremas solares elaboradas con sustancias químicas, que nuestra piel absorbe y lleva directamente al torrente sanguíneo, que con el tiempo trajo consigo muchas enfermedades cómo los melanomas, pero no por la exposición al sol sino por los químicos que ponemos en nuestra piel al exponernos al sol. Es importante que sepas que la mayoría de las sustancias con las que están hechos estos bloqueadores solares tienen una estructura muy parecida a la estructura de nuestras hormonas, con una habilidad impresionante de conectarse con nuestros receptores hormonales, generando caos y confusión en nuestros sistemas hormono dependientes, como el sistema reproductor sexual, neurológico, metabólico, inmunológico, alterando su funcionamiento. Las sustancias que contienen estos bloqueadores químicos son disruptores endocrinos que dañan nuestra salud. Prefiere los bloqueadores físicos si estas en horas de sol muy fuerte, estos generalmente están hechos a base de minerales como el óxido de zinc o dióxido de titanio o la mezcla de ambos con el objetivo de crear una capa física en la piel que refleja los rayos del sol como si fuera un espejo. Los bloqueadores solares a base de estos dos minerales son muy seguros y se puede aplicar en niños a partir de 1 año, sin embargo recuerda también protegerlos con ropa, gorro, y a la sombra si van a estar expuestos más de una hora al sol o al medio día.
No olvides… el sol es fuente de vida.